domingo, 8 de noviembre de 2015

Qué fácil es ver solo nuestro lado de la historia, nuestra versión de los hechos, solo nos preocupa y afecta nuestro sentir, no nos ponemos del otro lado, ni queremos ver lo que hacemos o hemos hecho mal, no nos interesa, ni siquiera pensamos en ello, nos creemos perfectos, sin defectos y mártires, pero somos realmente tan buenos?, tan correctos?, qué pasa con nuestros errores?, qué pasa con nuestras malas actitudes?, por qué no podemos ver cómo nos ven? o de qué forma actuamos?, si tuviéramos un espejo siempre delante nuestro y una grabadora para escucharnos, ahí si nos daríamos cuenta de nuestras miradas, gestos y palabras  y veríamos cómo somos en realidad y de qué manera actuamos frente a los demás.....

viernes, 22 de agosto de 2014



Cuando supe que estabas dentro de mí, mi corazón se inundó de alegría, en ese momento fui muy feliz, te deseaba, te quería y sentía muchas cosas nuevas y hermosas dentro de mí.
Cuando naciste y vi tu carita, mi vida entera cambió, ya no fui la misma, sino que fui mejor.
Tu llanto, tus sonrisas, tus balbuceos, la primera vez que caminaste, que te caíste, que gateaste, la primera vez que dijiste "mamá", tu primer día de colegio, tu primera fiesta, tu increíble personalidad, por donde íbamos te conocían, te querían y tú con desparpajo atrapabas a todos.
Has ido creciendo y siempre traté de enseñarte lo bueno y lo malo, te enseñé todo lo que se y siempre estuve ahí para ti.
Hoy aún estoy aquí y mañana, si Dios me lo permite,  seguro que igual estaré.
Me has causado dolor hoy y tal vez no sea la única vez, pero siempre estaré para ayudarte, para guiarte, regañarte, aplaudirte, complacerte, alcahuetearte, acompañarte.
Te quiero más de lo que imaginas, mi amor es eterno y verdadero, eres simplemente una parte de mí.
Espero que seas el mejor hombre, el mejor padre, el mejor hijo, el mejor hermano, el mejor nieto, el mejor novio, el mejor amigo....... el mejor TODO.

Te amo profundamente hijo

lunes, 7 de julio de 2014



Entre sombras está mi alma,
mi corazón se va acelerando,
mi cuerpo ya no responde
y mis pies siguen caminando .

En mi cabeza todo revolotea
mis manos no dejan de temblar,
diviso en la distancia el horizonte
mientras comienzo a divagar.

Mis pensamientos se confunden con el viento
mi cuerpo no responde al movimiento.

Mis ojos se humedecen sin saber por qué,
la respiración agitada me ahoga lentamente,
mi boca reseca necesita y desea gritar,
mis pies se detienen, ya no quieren caminar.

La ira de repente se apodera de mi
y no se como la puedo controlar,
hiero y lastimo a los de mi alrededor,
quisiera detener esto, pero no puedo parar.

Cierro mis ojos y respiro profundo
trato de mantenerme tranquila en mi sentir,
el viento acaricia mi rostro cansado,
y el sol sobre mi piel me hace revivir.

martes, 17 de junio de 2014



Estoy una vez más frente al mar
aquel que me conoce como ninguno,
mis pensamientos flotan sobre las olas
aquellas que comprenden mis sentimientos.
El calor del verano me invade de nuevo,
la brisa cálida humedece mi piel
y el olor del mar evoca en mis recuerdos,
siento estremecerse todo mi cuerpo.
Unas gotas comienzan a asomarse
el cielo se nubla y oscurece
mi mirada yace en el horizonte
mi corazón siempre recordándote.
Esta ansiedad que no me deja sola
ni el hermoso paisaje me puede relajar,
mi mente sigue divagando
pido a gritos un poco de paz.


miércoles, 28 de mayo de 2014


Con el sonido de la lluvia me acuesto
mi cuerpo se estira y relaja
mi olfato percibe el olor de la lluvia
el cual evoca mi infancia

el cielo está gris y apagado
hay frío y mucha humedad,
y acostada en mi cama te pienso
te extraño, te quiero, te deseo.

Mis anhelos están en el aire
flotando junto a la lluvia,
mi esperanza sigue intacta
posada junto a la luna.

El cielo forrado de nubes
el ambiente yace gris,
como estaba mi pobre alma
antes de quererte a ti

Abrázame en las noches
cúbreme con tu dulce amor
envuélveme de suaves besos
e inúndame de mucha pasión.

Mi corazón baila de nuevo
mi rostro irradia felicidad,
le doy gracias a Dios
por esta nueva oportunidad.

lunes, 26 de mayo de 2014


Olores por doquier, paseo por la Riera en las tardes mientras que voy conversando con mi madre, mis hijos o Marta, de vez en cuando nos detenemos en las tiendas donde en esta época hay rebajas, mucha gente dentro viendo y comprando, siempre hay algo que nos llama la atención, pero nada como pasar frente a una panadería, con ese olor a pan recién horneado, a pasteles, chocolate, croissants y ensaimadas, me detengo a observar esas delicias y el olor que invade toda la calle alrededor, todo tan bien colocado y a la vista, que es inevitable detenerse a comprar algo. Seguimos nuestra plática mientras caminamos y de vez en cuando, seguimos observando las vidrieras con zapatos, ropa, bisutería y adornos, hasta que volvemos a tropezar con una charcutería, de nuevo el olor, el olor a jamones, salchichón, chorizo, lomo embuchado y fuet, increíble entrar en la tienda y mirar todo alrededor, los jamones colgando en el techo, y todo mostrado de una manera magnífica, que no se puede salir de ahí sin haber comprado algo antes, así sea un poquito de 2 o 3 cosas para probar y deleitarse en casa con un buen pan con tomate y una copa de vino. Con el clima frío pareciera que los olores se intensifican y atraen más la atención, hasta parece que da más hambre de lo habitual, pero me agradan los aromas al pasar, despiertan el apetito y las ganas de probar.

lunes, 12 de mayo de 2014


Me despierta el timbre del teléfono, me deja un mensaje Marta para decirme que pronto me vendrán a  buscar para ir a caminar. Me desperezo y me estiro, me levantó y voy al baño a lavarme la cara y los dientes, voy a la cocina a prepararme un café con leche, mientras me lo voy bebiendo, me visto y organizo mi mochila con lo indispensable para salir. Me preparo un bocadillo de jamón y lleno el termo con agua. Me vuelven a mandar un mensaje para decirme que debo bajar porque ya llegaron. Me dirijo hacia el ascensor, bajo y abro la puerta hacia la calle, una brisa fría me congela la cara, me dirijo al coche donde me esperan Marta y Tomás, los saludo y nos dirigimos a nuestro destino, vamos hacia la montaña, donde variamos a veces el lugar, a la final, lo que importa es caminar, respirar aire puro, conversar y pasarla bien un rato. Estacionamos el coche, nos bajamos e iniciamos nuestro camino, está un poco nublado porque aún es temprano, hay mucho viento, eso hace que sintamos más frío que de costumbre, Marta y yo conversamos y como siempre nos reímos. Siento cansancio mientras comenzamos a subir, trato de no pensar en eso y concentrarme en los árboles y la vegetación alrededor, diviso a lo lejos el mar, que siempre acompaña mis días desde cualquier punto de la ciudad, eso es lo que me encanta de vivir aquí, observar el mar siempre en todo su esplendor, con sus diferentes tonalidades dependiendo del color del cielo. Seguimos subiendo, la respiración de los tres se siente más fuerte, pero aunque siento más cansancio y frío, me sigo concentrando en lo que hay en mi alrededor, Marta y Tomás, van mirando a los costados a ver si localizan alguna seta y pasan todo el camino buscando, yo, sin embargo, siempre tengo a punto mi cámara para ir tomando fotos de lo que me rodea; el camino, los árboles, las montañas, las piedras, las raíces, algún animalito o alguna casa, todo me parece interesante y hermoso, así que no dejo de tomar fotos. De vez en cuando nos pasan ciclistas que al igual que nosotros, toman esa ruta para ejercitarse, y una que otra vez gente que como nosotros, caminan o buscan setas. La mayor parte de la caminata transcurre en silencio, de vez en cuando se escucha el ruido de una sierra, o de alguna moto, pero siempre a lo lejos y por supuesto, Marta y yo muchas veces reventamos ese silencio con nuestras carcajadas, porque siempre estamos alegres, conversamos y reímos. Llegamos a un restaurant donde nos sentamos adentro al lado de una chimenea, pedimos unas cervezas y sacamos nuestros bocadillos, Tomás se pone a leer el periódico en catalán, mientras todos conversamos, nos quedamos un buen rato ahí, se siente tan bien estar resguardado un poco del frío, y la chimenea se ve tan perfecta ahí puesta, parece sacada de una postal, por eso no dudo en tomarle igualmente una fotografía. Terminamos de desayunar y nos disponemos a regresar, ahora se hace un poco más suave, así que comenzamos a bajar la montaña, el día mejora, ya , no se ven nubes en el cielo y ahora el sol nos calienta, así que se hace mejor el regreso, yo sigo maravillándome con el paisaje, aunque a muchos les parezca aburrido y monótono, a mí siempre me asombra y me deslumbra. Ya casi llegamos, unos cuantos metros del coche, vemos un limonero que sobresale de una casa, así que le quitamos unos pocos limones de los más grandes y amarillos que tiene, su olor es intenso y grandes en tamaño. Y así seguimos hasta el coche donde acaba nuestra caminata por ese día.


Qué fácil es ver solo nuestro lado de la historia, nuestra versión de los hechos, solo nos preocupa y afecta nuestro sentir, no nos ponem...